
(Fotografía: Pepe Nogales Moreno)
Posada en una hoja de roble espera la gota de rocío a que el suave sol de la mañana la lleve de viaje. Brilla en su espera como estrella en las noches de marzo, y sueña con los páramos cubiertos de amapolas que descubrirá desde su pedestal allá en el cielo.
Después, la lluvia las llevará a un nuevo destino, nuevas rutas por ríos caudalosos, acequias y huertas, viviendo y dando vida a su paso. Conocerá mares y océanos, calma y tempestades, saciará la sed de algún vagabundo, y renacerá, alguna fría mañana de diciembre renacerá. Puede que esta vez sea en una brizna de hierba, esperando.
JNM